¿Alguna vez has soñado con un viaje que combine aventura, lujo y una explosión de sabores? Pues bien, así comenzó mi travesía hacia Dubai, EAU en un crucero. Imagínate la combinación: el suave balanceo del mar, la opulencia de un crucero y los aromas inconfundibles de las especias árabes; sí, suena como un sueño, ¿verdad? Pues déjame contarte cómo hice este sueño realidad y cómo tú también puedes hacerlo con estilo y sin vaciar la cartera.
Para arrancar esta aventura, lo primero que hice fue buscar un vuelo económico a Dubai. Aquí es donde vuelosrapido.com se convirtió en mi mejor aliado. Tienen acceso a ofertas mayoristas y de verdad, ¡los precios son de otro mundo! Así que si planeas volar desde México, echa un ojo a aerolíneas como Emirates o Qatar Airways; a veces las ofertas incluyen lujos inesperados. Después de aterrizar en este oasis de modernidad, mi siguiente misión fue encontrar alojamiento accesible que me permitiera ahorrar lo suficiente para disfrutar de todas las delicias locales.
Opté por alojarme en hostales y pequeños hoteles familiares, que no solo resultaron económicos, sino que también me dieron acceso a algunas de las mejores recomendaciones locales para explorar la gastronomía callejera. Porque, seamos sinceros, dormir en un lujoso resort no reemplaza una charla con el dueño de un pequeño hostal mientras compartes un té y te cuenta dónde encontrar el mejor shawarma de la ciudad.
A bordo del crucero, cada día era una nueva oportunidad para dejarme sorprender por el buffet internacional, aunque mi corazón se inclinaba siempre por los sabores locales. No hay nada como morder una jugosa y bien sazonada brocheta de cordero mientras ves el sol ponerse tras el Burj Al Arab desde la cubierta del barco. Y cuando el barco atracaba, mi primer destino siempre eran los mercados callejeros, como el famoso Zoco del Oro, donde, créeme, es fácil perderse entre el brillo de las especias, los dulces árabes y la irresistible música en vivo.
Un consejo que siempre aplico: participa en alguna clase de cocina local. Comparto uno de mis secretos mejor guardados, en Dubai, hay clases donde puedes aprender a hacer ‘machboos’. Es como nuestro arroz con pollo, pero elevado a la enésima potencia con la mezcla perfecta de cúrcuma, azafrán y cardamomo.
Al final del viaje, me quedé con un sabor a nostalgia, satisfecho de haber conocido la verdadera alma de Dubai más allá de los rascacielos. Recordé por qué decidí dejar las cocinas de los restaurantes de alta gama para aventurarme por el mundo: la autenticidad de los sabores callejeros y el calor humano de las sonrisas sinceras que encuentro en cada mercado y puesto callejero.
Así que, si alguna vez consideras un viaje a Dubai, hazlo a tu estilo, con la mente y el paladar abiertos. La vida es muy corta para quedarte solo con lo conocido. Y recuerda, cada comida es una oportunidad para saborear el mundo. ¡Nos vemos en el próximo mercado!

Carlos Mendoza
Mochilero Gourmet
Chef mexicano de 38 años que dejó los restaurantes de lujo para viajar por el mundo con poco presupuesto, pero sin renunciar a las experiencias gastronómicas auténticas. Busca los mejores sabores en mercados locales y pequeños puestos callejeros.